Tu boca, besos de pasión desmedida, hermosura latente de una literatura del deseo, tu sexo, profecía obligada, nuestros labios se funden mientras construyen aromas, deseos y sentimientos, liturgia de un amante delirante, tu lengua herejía que convoca a un placer enajenado alucinante. Exorcismo del demonio entre tus piernas de vampira, tu orgasmo bautizado como agua santa escurre de tu vientre a mis labios más que sentenciados a morir en tu morada.
Poder inaudito para explicar la Santa Esencia del placer.
ResponderEliminarDescripción asombrosa de la brujería del amor.